Por... MILENA ALVAREZ LEON

Presentado a: Nazly Vargas Hernandez
Asignatura: Ecologia Humana
Universidad Distrital Francisco Jose de Caldas

El Origen y la Evolución del hombre


La evolución humana (u hominización) explica el proceso de evolución biológica de la especie humana desde sus ancestros hasta el estado actual. El estudio de dicho proceso requiere una búsqueda interdisciplinar en la que se aúnan conocimientos procedentes de ciencias como la antropología física, la lingüística y la genética.







 Aparición de los mamíferos


Hace 65 millones de años desaparecieron los grandes reptiles dinosaurios y comenzó el desarrollo de los mamíferos.  Estos pequeños animales que dejaron el suelo para trepar a los árboles. El salto a la vida sobre los árboles se debió, posiblemente, a la necesidad de sobrevivir. Podemos decir que al desaparecer los grandes dinosaurios, los mamíferos sobrevivientes ocuparon el lugar predominante en la naturaleza y entre ellos se destacaron los primates  que habitaban en las copas de los árboles y que desarrollaron una gran capacidad para sobrevivir: poseían un cerebro superior puesto que podían coordinar la vista y el movimiento de las manos. Sus manos eran prensiles y la posición de los ojos les permitía una visión tridimensional.

Surgimiento de los primates


Hace 70 millones de años, entre los mamíferos se desarrollaron diferentes tipos de monos llamados primates.  Los primeros primates fueron animales pequeños, de hábitos nocturnos, que vivían (casi siempre) en los árboles.  Con el tiempo, algunos de éstos fueron cambiando sus hábitos y características físicas: su cráneo fue mayor, creció su cerebro, podían tomar objetos con las manos, adaptarse al día y alimentarse de frutas y vegetales.

Del tronco común de los primates, surgieron dos ramas de monos: 

1) las de los simios: chimpancé, gorila y orangután 
2) los homínidos o protohumanos, dando origen del hombre actual

Características Básicas de los Primates:


El nombre de "Primates" fue usado por primera vez por Linneo en 1758 en su ordenación taxonómica de los animales; significa "primeros" en latín. Linneo incluyó en su orden Primates a los humanos, monos antropomorfos, monos del Viejo Mundo y monos del Nuevo Mundo, distinguiéndolos del resto de mamíferos, a los que llamó "Secundates" (segundos).



  •  Manos y pies con cinco dedos 
  •  Pies plantígrados. 
  •  Pulgar oponible en manos y pies (algunas especies, como el hombre, han perdido la capacidad de oponer el pulgar del pie). 
  •  Clavículas presentes. 
  •  Uñas planas en lugar de garras (en la gran mayoría de las especies). 
  •  Visión a color (en la gran mayoría de las especies). 
  •  Articulaciones del hombro y del codo bien desarrolladas. 
  •  Hemisferios cerebrales bien desarrollados. 
  •  Visión binocular (en diferentes grados). 
  • Órbitas oculares rodeadas de hueso.

Los homínidos o primeros humanos:


Se llama así a una de las dos familias de monos en que se dividió el grupo de los primates.  Mientras que en la familia del orangután, del gorila y del chimpancé no hubo cambios, hace 15 millones de años en la familia de los homínidos comenzó la evolución hasta el hombre actual.

Los primeros homínidos y el largo camino hacia el hombre: Diversas fueron las especies que unieron al hombre actual con los primeros homínido.  Las especies que representaron verdaderos saltos evolutivos, es decir, verdaderos momentos de cambio, fueron las siguientes:
Australopithecus: ("monos del sur") fue el primer homínido bípedo (caminaba en dos patas y podía correr en terreno llano).  Poseía mandíbulas poderosas y fuertes molares.  Largos miembros y pasaban gran parte de su vida en los árboles. Su cerebro tenía un volumen inferior a los 400 centímetros cúbicos.  De aquí se deduce que el andar erguido se produjo mucho antes que la expansión del cerebro.  Su talla no superaría el 1,20 m. de altura y los 30 Kg. de peso. Antigüedad: 4 millones de años


Está representado por un grupo de fósiles prehumanos hallados en el sur y el oriente del África. Los más antiguos fósiles tienen aproximadamente 5 millones de años y los más recientes, 1 millón de años. El primer australopithecus fue encontrado en la década de 1960 en África oriental, (Etiopía) y fue llamada Lucy.

Homo habilis: ("hombre habil") esta especie de homínidos, debieron adoptar una posición mas erguida porque las variaciones climáticas hizo crecer los pastizales y obligó a que se paren sobre sus pies para divisar posibles peligros. Tenían un cerebro más grande, alrededor de 750 centímetros cúbicos. 

Su característica más importante fue el cambio en su forma de alimentación: ya no sólo comían frutas y  vegetales sino también animales. De cuerpo velludo. Actualmente los investigadores no están de acuerdo sobre si el homo habilis cazaba intencionalmente y fabricaba utensilios para hacerlo. Se cree que podrían haber hablado. Fueron hallados restos fósiles en la Garganta de Olduvai (Tanzania) junto a los primeros utensillos. Antigüedad: 2 millones de años

Homo erectus: ("hombre erguido") Tambien llamado Pithecanthropus Erectus. Algunos lo consideraron el representante directo del hombre, pero hoy se sabe que muchos austratopithecus anteriores poseían rasgos semejantes.  Son los primeros homínidos que se distribuyeron ampliamente por la superficie del planeta, llegando hasta el sudeste y este de Asia. Cuerpo alto, espesa cejas y gran musculatura. Poseían un cerebro mayor que el del homo habilis: alrededor de 1.100 centímetros cúbicos.  Descubrieron el uso del fuego y fabricaron la primera hacha de mano.  El primer homo erectus fue encontrado en Java (Oceanía) a fines del siglo pasado.  El hallazgo de restos de homínidos de esta especie en las cavernas de Pekín permitió la reconstrucción de algunos aspectos de su vida. Antigüedad: 1.5 millones de años

Homo sapiens: ("hombre racional") vivió en Europa, en África y en Asia.  Los hallazgos arqueológicos reflejan cambios importantes en el comportamiento de esta especie: utilización de instrumentos de piedra y hueso más trabajados, cambios en las formas de cazar, uso y dominio del fuego, empleo del vestido, aumento en el tamaño de las poblaciones, manifestaciones rituales y artísticas.  El representante del homo sapiens más antiguo es el hombre de Neanderthal (Alemania). Antigüedad: De 150.000 a 200.000 años.

Homo sapiens sapiens: ("hombre moderno") Sus características físicas son las mismas que las del hombre actual.  Su capacidad cerebral es de alrededor de 1.400 centímetros cúbicos.  Se cree que apareció en Europa hace alrededor de 40.000 años.  El homo sapiens sapiens es el que protagonizó, a partir del año 10.000 a.C., cambios muy importantes en la organización económica y social, como las primeras formas de agricultura y domesticación de animales, y la vida en ciudades. Su representante mas fiel es el hombre de CroMagnon (Francia).Antigüedad: De 35.000 a 40.000  años.





La realidad ante la evolución del hombre


Las tres fases de la evolución del ecosistema humanizado.

La primera fase comenzó entre 5 y 6 mil años atrás con asentamientos que se convirtieron en lo que conocemos como las antiguas civilizaciones del valle de Mesopotamia (hoy Irak), Egipto, India y China. Los primeros asentamientos dependían mayormente de la agricultura y de animales domésticos. Pero, conforme la civilización creció en tamaño y en rutas de comercio, estos asentamientos se convirtieron en centros para mercaderes, artesanos y oficiales del gobierno. La división entre "pueblo" y "ciudad", "urbano" y "rural" había comenzado. Un patrón similar fue seguido por las civilizaciones Griega, Iraní, Romana de la Gran Zimbabwe. 

Segunda Fase
A pesar que la especie humana empieza a formar parte de la Biosfera hace relativamente poco en términos geológicos, hemos conseguido cambiar la faz de la tierra como ninguna otra especie. Somos un primate, un animal como cualquier otro, pero con una específica capacidad (producida por la evolución biológica) para la cultura, para la transmisión acumulativa, no genética, de información. Los seres humanos aparecemos en el planeta en un margen temporal amplio que depende de donde fijemos la propia definición de lo humano, con una capacidad de transtornar el medio sin precedentes.

La palabra "ciudad" viene del latín "civitas" que se refiere a una alta organización comunitaria y se uso mucho para describir a la Ciudad-Estado de la Antigua Grecia. Palabras como "Civil" "Civilización" y "Ciudadano" tienen la misma raíz.

Mientras que el orígen de las ciudades data de miles de años atrás, la ciudad como la conocemos hoy data solo de unos cientos de años atrás. Después de la Revolución Industrial un gran número de personas se mudaron a las ciudades en busca de trabajos, la mayoría en fábricas; desde entonces ha habido un crecimiento sin precedente en el número y tamaño de las ciudades alrededor del mundo. A este proceso se le llama "urbanización". La urbanización es medida por el cambio en porcentaje de la población de la ciudad de año en año. Esto se llama grado de "crecimiento urbano" Por ejemplo, si tu ciudad tenia 200 personas el año pasado y este año tiene 210, su crecimiento urbano es de 5%.

Los comienzos de las ciudades se pueden rastrear hasta 5, 000 años en el pasado. Cuando los seres humanos aprendieron a cultivar alimentos para poder sobrevivir en un mismo lugar en vez de moverse de un lado a otro para cazar y recolectar alimentos, los asentamientos comenzaron a aparecer. Estos asentamientos fueron el inicio de lo que eventualmente se conocería como ciudades. Las ciudades se desarrollaron en por lo menos tres fases distintas, haciéndose cada vez más complejas y especializándose en cada etapa.









La tercera fase comenzó después de la Segunda Guerra Mundial. El más largo y rápido crecimiento en la población urbana del mundo se ha suscitado a partir de 1950.


Hasta el año 1000 antes de nuestra era no se encuentran pruebas fehacientes del desarrollo de la compleja diversidad interrelacionada de población urbana, a la que daríamos el nombre de ciudad; surgiendo en las extensas llanuras aluviales entre el Tigris y el Eúfrates. La complejidad de subsistir en dicho territorio provocó efectivamente la aparición de instituciones para mediar entre la agricultura y pastores, entre pescadores y marinos, entre labradores y quienes construían los arados, etc. 


Con la sedentarización de los pueblos, más o menos nómadas, aparecieron las primeras ciudades que se convirtieron en centros de innovación cultural. Surgieron nuevas tecnologías e instituciones sociales: la escritura, la cerámica, el uso de metales, los sistemas de regadíos, la especialización laboral y la desigualdad en la distribución de la riqueza, la educación formal, las guerras masivas, las grandes epidemias como la "peste negra", los mercados de bienes de servicios, las grandes rutas comerciales, el esclavismo, la democracia, la ciencia, las religiones, el colonialismo, los orígenes del capitalismo... 


Esta alteración del entorno se hace especialmente notable cuando el hombre abandona su vida en pequeños grupos o tribus, hace unos 4.000 años antes de nuestra era, cuando una serie de adelantos técnicos produjeron lo que se llamó la Revolución Urbana. La formación de grandes acumulaciones humanas dio pie a un comercio fluido, a intercambio de experiencias, productos manufacturados, ganado o frutos de la tierra. Las ciudades necesitaban no sólo comida y agua, sino también materias primas para su trabajo. A medida que el asentamiento simple se convertía en una ciudad creciente, atraía hacia sí cantidades inmensas de comida, de materias primas, de minerales y madera, seguidos de turba, carbón, ganado, estiércol, etc., y abundancia de otros productos manufacturados procedentes de otros lugares.


A medida que los asentamientos rurales, siguiendo las innovaciones agrícolas, aumentaban de tamaño, el campo podía enviar el exceso de población a las ciudades, y todavía lo hace en la actualidad en la mayor parte del mundo. En el pasado esto solía ser deseable, puesto que la ciudad, con frecuencia, se expandía rápidamente y la tasa de natalidad era inferior a la rural (como sigue ocurriendo en casi todo el mundo). Sin embargo, un movimiento demasiado rápido de las gentes hacía la ciudad ha creado una clase de pobres urbanos que, en la actualidad, plantea a los gobiernos uno de sus mayores problemas.


Podemos hacer algunas observaciones generales. Para la mayoría de las ciudades su crecimiento ha sido el resultado de tres etapas de "crecimiento económico," "incremento natural" y "migración rural-urbana". Hay excepciones a esta regla. Algunas ciudades por ejemplo son "creadas" por los gobiernos que quieren quitarle la carga a otras grandes ciudades. Algunas veces estas ciudades son creadas para ser capital del país como el caso de Yamoussoukrou que remplazó a Abidjan como ciudad capital de Costa de Marfil. Asignar una nueva capital usualmente significa la transferencia de las oficinas del gobierno, embajadas y negocios a una ciudad más pequeña para atraer a la gente que sobrecarga otras ciudades. Otra "creación de capital" es la ciudad de Brasilia, en Brasil.


En términos sencillos el "incremento natural" es el número de personas que nacen cada año menos el numero de muertes. El crecimiento poblacional se da cuando existe un índice positivo de incremento natural. Este es el mayor factor en el crecimiento de la ciudades en países en vías de desarrollo.


La "migración" también afecta el crecimiento de las ciudades. La " migración rural-urbana " se suscita cuando las personas del campo se mudan o emigran a la ciudad. Este fue el mayor factor de crecimiento urbano después de la industrialización y hasta los 1970s. Hoy, las migraciones internacionales o movimientos de gente de un país a otro se suman al gran número de gente en las ciudades más grandes del mundo.


Las personas se mudan a la ciudades por varias razones, pero la razón más significante es la económica - cuando la economía de una ciudad prospera atrae a la gente. La promesa de trabajo y confort, encanto y destello, atrae a la gente. También hay factores de "impulso": las sequías o la explotación de campesinos pueden causar la extrema pobreza rural y eso crea el "impulso" de la gente a salir del campo. 


El sistema de valores basado en el mito de la productividad y al rentabilidad a corto plazo es el responsable de múltiples problemas, así mismo, las nociones de progreso y crecimiento han sido abusivamente confundidas. Es, en este contexto, complejo y global, donde es preciso examinar hoy los ataques al medio ambiente. Estos son graves y extensos; pero tampoco se puede ignorar que el ser humano ha conseguido muchas veces mejorar su medio ambiente natural, transformándolo y obteniendo una expansión cultural y social o un mayor bienestar psicológico.


Es precisamente en las ciudades donde las disfunciones se hacen más patentes (tráfico, masificación, contaminación, deterioro del paisaje, residuos, violencia, etc.) ocasionando un importante deterioro de la salud, de las relaciones sociales y de la calidad de vida. El sistema constituido por los factores naturales, culturales y sociales, que se interrelacionan entre sí y condicionan la vida del hombre de las urbes, está cada vez más modificado y condicionado por éste..


Los problemas del medio ambiente y de la contaminación preocupan hoy en todo el mundo. Hay quien evoca con ellos la misma supervivencia del hombre sobre la Tierra o los terrores del futuro; otros, en cambio, minimizan el aspecto negativo del impacto de la acción humana sobre la biosfera y hablan de los beneficios que pueden derivar de la aceleración del ciclo de diversos elementos, como el carbono. Entre los primeros influye decididamente la ideología de la Naturaleza que, ignorando la determinación económica y política de los problemas del medio ambiente, preconiza una vuelta a ideología y una nueva moral ecológica que oculta muchos problemas. Entre los segundos hay una fe ciega en al capacidad de la ciencia para resolver cualquier problema y en convertirla en motor de la historia. Ambas actitudes se ven con frecuencia fusionadas y unidas a una creciente afán de búsqueda de "modelos" que permitan prever el futuro de la humanidad.